Por Jean-Pierre Garcia
En exclusiva desde Cannes
Tenemos aquí la primera gran cita con las estrellas del Festival de Cannes 2016: Jodie Foster, George Clooney, Julia Roberts…. Salen los fotógrafos, invaden el espacio pequeño donde la prensa puede escribir. Ellos son los que para ganarse la vida necesitan rostros famosos, lindos y jóvenes actores…Y por esto les gusta tanto “Money Monster” (si tienen oportunidad de verla), que se exhibió fuera de competencia.
Esta película de Jodie Foster antes de ser programada en muchas salas francesas decidió dar una vueltecita por La Croisette. Y de veras que se lo merece este buen ejemplo de cine de acción con elementos políticos. Ya sabíamos que tanto George Clooney como Jodie Foster dedican mucha energía y dinero propio a producir películas comprometidas con ideas que no son las mismas de los capos de los estudios de hoy. Este grupo un tanto izquierdista de la industria nos otorgó antes películas poderosas como “Siriana”, “Good Night and Good Luck” y muchas otras con su amigo Steven Soberberg.
“Money Monster” nos introduce en el mundo financiero y de los medios de comunicación, con humor y precisión, con violencia y dolor. El filme narra las incidencias que ocurren durante un popular programa de televisión de finanzas, “Money Monster”. Al momento en que empieza una de sus transmisiones, un hombre surge con una pistola y una bomba y toma como rehén al presentador estrella. No se trata de broma o de un ardid publicitario, todo parece auténtico, en especial cuando Kile, el joven terrorista, empieza a disparar por todas partes cuando la productora del show pide que se corten las cámaras, pero todo el asalto y la toma de rehenes salen al aire, en sus más mínimos detalles. El joven Kile, escuchando los consejos de Money Monster, ha invertido todos sus ahorros comprando valores de la compañía IBIS y, como consecuencia, ha perdido lo poco que le había dejado su abuela en herencia. Por esto, quiere que todo el mundo sepa lo peligroso que son estos grupos financieros.
La directora Jodie Foster sabe dar ritmo y sentido a su obra. De modo alternativo vemos dos universos en vivo: el de la toma de rehenes (con George Clooney como víctima), y el trabajo de la productora de televisión (Julia Roberts), que sigue organizando el show.
Planes cortos, edición muy rápida, las sorpresas surgen aquí y allá sin ser manipuladoras. Nos damos cuenta que en este asunto todas las perspectivas están cambiando mientras tratan de calmar al asaltante, tratan de ganar tiempo en vano. ¿Quiénes son verdaderamente los malos ? ¿Quiénes protegen a quién ? ¿Los policías ? ¿Los financieros ? Sin contar la historia, uno se puede imaginar lo que pasa y va a seguir pasando. El papel de los hombres, lo que piensan y cómo actúan las mujeres en este tipo de situaciones, muchos de los elementos dramáticos comunes son plasmados en esta historia de Jodie Foster. El guión resulta muy eficiente, con ritmo y sorpresas. En la proyección del filme en Cannes, donde se mezclaron público y prensa, se podía notar las olas que se mueven en una sala cuando la gente disfruta la historia, ¡y por buenas razones!
Los actores tienen un desempeño excelente, tanto las estrellas como los de segundo rango. No son perezosos, creen en esta historia y se sienten muy cerca de la propuesta de la directora.
Esta corriente del cine estadounidense independiente es muy valiosa. Nos da el sentimiento que todas las bocas pueden decir quiénes son los responsables de la crisis financiera. Es lo que quiere decirnos Jodie Foster con su Money Monster. ¡Felicidades!
Foto: George Clooney & Julia Roberts © G. Pimentel / Getty Images. Festival de Cannes – Page Officielle