El portal del cine mexicano y mas

Desde 2002 hablando de cine



Noticias

2011-09-06 00:00:00

Crítica: Alamar: cine en búsqueda de las raíces

Por Hugo Lara Chávez   

Pedro González Rubio, nacido en 1975 con estudios de cine en The London Film School, había dejado un buen sabor de boca como cineasta en ciernes a partir de sus trabajos anteriores codirigidos con Carlos Armella, los documentales Toro Negro (2005), y La Tierra Compartida Common Ground, el making of de Babel (2008), de Alejandro González Iñárritu. Ambos obtuvieron sendos reconocimientos y algunos premios en festivales.   

Su primera aproximación al cine de ficción es precisamente Alamar (2010), una película que se sitúa en la frontera del documental. González Rubio recurrió a dos personajes reales para interpretarse a sí mismos: el pescador Jorge, un joven de origen maya y su pequeño hijo Natan, que concibió con una mujer italiana de la cual se está separando. Padre e hijo hacen un viaje al lugar donde vive el primero, Banco Chinchorro, un atolón de coral en el caribe mexicano, para despedirse antes de que el niño viaje a Roma donde se establecerá con su madre. La experiencia se convierte en un recorrido maravilloso por la asombrosa geografía natural del lugar, al mismo tiempo en que los dos personajes, casi solitarios, experimentan momentos entrañables que los unen aún más.   

Así, el filme está confeccionado por viñetas de estos personajes en ese particular ambiente, sea durante una jornada de pesca o mientras admiran a las gaviotas o cuando el niño juga con ellas y se le espía conversando. Si bien es cierto que la relación entre ellos pertenece a la vida real, el director provoca situaciones y los manipula para llevarlos hacia el territorio que quiere, de ahí su condición de ficción. De esta forma, la realización asume un estilo semidocumental bajo un ritmo semilento, de planos largos, propio para la contemplación de esos dos seres cuya fragilidad se nota más ante la imponente naturaleza, donde los sonidos del mar se vuelven sus únicos cómplices.   

Alamar es un filme sencillo pero honesto. Filmado con el mínimo de recursos, los 75 minutos de su duración (breve para el promedio de largometrajes) fue logrado gracias a un crew reducido del propio realizador como camarógrafo, su sonidista y sus actores, además del auxilio de Alexis Zabé (Luz silenciosa, 2008), para las tomas submarinas. El mismo González Rubio se multiplicó como guionista y editor. Se trata de un tipo de cine que se opone en la forma y en el fondo a las grandes producciones que suelen llegar a la cartelera, en ese sentido resulta refrescante.   

Hay una visión y un interés por asomarse a una realidad poco conocida para los auditorios urbanos, en lo que puede señalarse como una vuelta a los orígenes y a las sociedades tradicionales; un filme ecologista, emotivo y sincero. Hay momentos en que se nota sobremanera la fascinación del director por este ambiente, la admiración que casi lo paraliza y que en algunas secuencias lo hace nadar sólo por la superficie.   

Alamar fue ganadora como Mejor película y el Premio del público del Festival Internacional de Cine de Morelia 2009 ­así como del VIPER TIGER AWARD en el Festival de Rotterdam, entre otros premios.   

Disfruta esta película completa comprándola o rentándola en Eyelet, aqui abajo:

Ficha técnica México 2009 Duración: 73mins. Dirección, guión, fotografía, edición y productor: Pedro González Rubio Productor: Jaime Romandía Sonido directo: Manuel Carranza Fotografía submarina: David Torres Castilla Fotografía subamarina Adicional: Alexis Zabé Diseño sonoro: Héctor Ruíz, Omar Juárez Espino Personajes principales: Jorge Machado Castro, Natan Machado Palombini, Roberta Palombini, Nestor Marín "Matraca".