Crítica: «La Monja»: el hábito no hace al susto
Por Andrés Bayona
“La Monja” (The Nun. 2018) es visualmente atractiva. Nos presenta una atmósfera tétrica y perfecta para aterrar a su audiencia. Sin embargo, se queda corta en ideas y en originalidad. Los sustos están cargados de clichés. En múltiples escenas la cámara gira a la izquierda, lejos del personaje, después gira a la derecha y hay algo aterrador justo a sus espaldas. Una vez más: vemos algo tétrico reflejándose en la ventana y acercándose a su víctima. Y una vez más: en un lugar silencioso, en medio de una noche cargada de niebla, inesperadamente, aparece un espectro al acecho.
Esta película intenta ser aterradora; sin embargo, termina convirtiéndose en una historia vacía y con mínimos elementos para poder recomendarla. “La Monja” es parte del universo de “El Conjuro”, una estrategia que ha sido rentable gracias a la producción de otras cuatro cintas que han pretendido escarbar hasta el cansancio subtramas que le den mayor combustible a la franquicia.
Ser parte de este tipo de sagas es un claro indicio de que la calidad decae en la medida en que se siguen estrenando nuevas entregas y en donde los realizadores no tienen que devanarse el cerebro para pensar en algo nuevo para asustarnos o sorprendernos en el cine. Puedo asegurar que “La Monja” es la peor en el mundo de “El Conjuro”.
Así como “Annabelle” hizo con la primera “El Conjuro”, esta película provee la historia de la antagonista de “El Conjuro 2”. La historia se desarrolla en 1952 en Rumania, en donde muere una monja bajo extrañas circunstancias. Posteriormente, el vaticano le pide a un sacerdote (Demián Bichir) y a una novicia (Taissa Farmiga) investigar el aparente suicidio. Después de ser escoltados al lugar por un local llamado Frenchie (Jonas Bloquet), no sólo descubren que están a punto de entrar al portal del infierno, sino que en éste habita un demonio que prefiere vestir un hábito para poder integrarse mejor en el convento.
Sin duda, la iluminación, las sombras y los detalles visuales de “La Monja” deben ser rescatados. Infortunadamente, y a pesar de que las locaciones están listas para incorporar elementos propios de una película de terror, la realidad es que todo lo que ocurre es trivial, predecible y no va a ningún lado. El reparto hace lo que puede. Farmiga es una buena actriz y proyecta vulnerabilidad y devoción en la pantalla. Sin embargo, todo se desperdicia gracias a sus ridículos diálogos y a escenas mil veces vistas en este tipo de películas.
“La Monja” pudo ser una cinta prometedora. Sin embargo, fue hecha por la razón más decepcionante de todas: sus realizadores sabían que generaría un significativo retorno en la taquilla a pesar de ser tan mala. En eso acertaron: “La Monja” lideró la taquilla con $53.5 millones en su fin de semana de estreno. Eso sí es aterrador.
Título original: The Nun: 96 minutos. Dirección: Corin Hardy. Guion: Gary Dauberman. Música: Abel Korzeniowski. Fotografía: Maxime Alexandre. Reparto: Taissa Farmiga, Demian Bichir, Jonas Bloquet, Bonnie Aarons, Charlotte Hope, Ingrid Bisu.
