Sinopsis

En 1914, el soldado Miguel Ángel escapa de los azotes que le da un capitán federal suponiéndolo culpable de la muerte de 14 centinelas. Miguel Ángel se reúne con sus amigos Tiburcio, Martín y los hermanos Perea, Máximo y Rodrigo, que forman el grupo de rancheros Los Leones de San Pablo. Todos deciden ingresar al ejército de Pancho Villa, a quien encuentran repartiendo maíz desde un tren. Villa, jugando con el apellido de Miguel Ángel del Toro, lo apoda el Becerrillo. En una batalla, Máximo con una ametralladora enemiga lazándola a pleno galope. Es herido y muere cuando saluda  Villa. El siguiente en morir heroicamente es Martín al lanzar granadas a un fortín. Al ir a parlamentar con un general enemigo, Tiburcio, Rodrigo y Melitón son detenidos. Van a ser ahorcados en la misma línea de fuego; Melitón será el primero en morir, pero el peso de su cuerpo rompe la soga cuando llegan los villistas a salvar a sus compañeros. En el tiroteo mueren Rodrigo y un joven teniente federal que cumplía su primera misión militar. Villa incorpora a los tres Leones restantes a su escolta, los Dorados. En una cantina, los tres se ven obligados a participar en un peligroso juego, la “ruleta rusa”, para eliminar, por superstición, al más cobarde de los trece hombres sentados alrededor de una mesa. Al caer una pistola lanzada al aire, en la oscuridad, la bala hiere a Melitón; quien prefiere suicidarse a soportar la humillación. Camino a Zacatecas, se declara una epidemia de viruela ean el tren villista. Miguel Ángel enferma y Tiburcio se ve obligado a matarlo y a quemar después el cadáver con todas sus pertenencias. Al demostrar Villa su miedo a la epidemia, Tiburcio deja el tren y se aleja decepcionado rumbo a su pueblo. Tiempo después Villa en plena derrota recala en el jacal de Tiburcio invitándolo a unirse a sus tropas. Tiburcio le presenta a su familia diciéndole que no podía abandonarlos. Villa asesina a la mujer y a la hija. Tiburcio intenta matarlo pero cae abatido por los disparos de la escolta de Villa. Pedro, hijo de Tiburcio, que conocía las hazañas de Villa por su padre se va con el caudillo.