Damián Alcázar y Lucía Gajá trabajan con presos mexicanos
Por Leticia Carrillo/Enviada
Acapulco, Gro.-Lucía Gajá, directora de Aquí estoy, afirmó en entrevista que el actor Damián Alcázar accedió a trabajar en el cortometraje “porque estaba muy interesado en lo que significaba interactuar con los internos del penal”.
Aquí estoy es uno de los cinco trabajos que integran el largometraje Corto libre -que abrió el Festival Internacional de Cine de Acapulco el miércoles 25- en el que también está presente un documental a través del cual se muestran testimonios de los presos del CERESO (Centro de Readaptación Social) de Ciudad Juárez que trabajaron como técnicos o actores al lado de intérpretes como Evangelina y Roberto Sosa.
“Lo que más me encantó del proyecto, al que fui invitada en febrero de este año, fue que viniendo de trabajar un tema de cárcel como lo hice en Mi vida dentro, pudiera hacerlo de nuevo pero ahora desde la ficción, en un penal mexicano y con un personaje masculino”, explicó la cineasta.
Gajá mencionó que la realización de Aquí estoy representó un reto para ella ya que desde que salió del Centro Universitario de Estudios Cinematográficos (CUEC), hace diez años, no había hecho películas de ficción: “era una creación totalmente libre y yo escribí un guión relacionado con el proceso de investigación del nuevo documental que estoy trabajando que trata sobre la violencia conyugal y con el que creo que se puede integrar muy bien”.
Aquí estoy retrata la emoción que vive un preso (Damián Alcázar), cuando su hija lo visita en la cárcel; el hombre la obsequia con un marco para fotos que él mismo hizo en uno de los talleres del penal pero ella lo rechaza.
La directora comentó que su cortometraje lo abordó técnicamente como si fuera un documental : “nos fuimos a Chihuahua prácticamente sin luces, hay mucho exterior y trabajamos con personas que están en un Taller de Actuación dentro del reclusorio”.
Asimismo, contó que durante el rodaje, que se llevó a cabo en dos días, dos bandas rivales de la cárcel se iban a pelear, por lo que el equipo de filmación tuvo que ser desalojado del inmueble: “parecía que iba a haber un motín pero era uno de los riesgos que sabíamos que correríamos aunque la verdad si me dio un poco de temor, sobre todo porque yo estaba embarazada” confesó Lucía Gajá.
“Pero lo que es cierto es que las personas que participaron en los cortos se volvieron entrañables y al final nos encariñamos con ellos, nos contaron sus historias y ellos se distraían trabajando con nosotros”, aseguró la realizadora.
Sobre sus siguientes proyectos, Gajá mencionó un documental llamado Cooperativa Cine Marginal, que estará listo a finales de 2010 y en el que aborda la historia de los estudiantes que formaron esta agrupación y que “de 1971 al 73 promovieron la lucha obrera y sindical a través de documentales y ficciones realizadas en Super 8 milímetros, que interactuaron con varios sindicatos y trabajaron muy a la par de los movimientos sociales de esa época”.
Acerca del trabajo que prepara sobre la violencia conyugal, la directora abundó: “Creo que con este tema pasa lo mismo que con el de la migración: ya se ha tratado mucho pero es importante seguir hablando de él pues se cree que es un problema exclusivo de los países del Tercer Mundo y no es cierto pues lo que pasa en países como Suiza o Finlandia es tremendo, ya que a pesar de ser naciones muy ricas, con educación y que cuentan con muchas cosas, tienen altos índices de este tipo de agresión”.
Lucía Gajá reveló que además de los países arriba mencionados y México, pretende ir a Estados Unidos, España y otro país de América Latina para desarrollar este trabajo que empezará a filmar en 2011.
“Me impacta mucho y me parece terrible que dos personas que se juntan porque se quieren, se acaben engañando, dañando con golpes o incluso matándose”, finalizó la directora.
